Padre Pio 28-May

28 de mayo

T煤 sabes, mi querida hija, que el remedio que propongo con agrado es la tranquilidad de esp铆ritu; y que proh铆bo siempre la inquietud orgullosa. Debes esforzarte por conseguir para tu esp铆ritu, agitado por obra del maligno, este reposo y esta tranquilidad, pensando en el descanso espiritual que nuestros corazones deben encontrar siempre en la voluntad de Dios, nos lleve esta adonde nos lleve. Vive, hija m铆a, en este valle de miserias hasta que Dios lo quiera, con una total sumisi贸n a su santa voluntad. Esta es la deuda que tenemos con la bondad de Dios, que nos ha hecho desear con gran anhelo vivir y morir en su amor. Esperemos, hijita m铆a, en este gran Salvador, que nos da la voluntad de vivir y morir en su predilecci贸n, hasta que nos d茅 la gracia de realizarlo.

(28 de mayo de 1917, a Annita Rodote,聽Ep. III,聽108)

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