5 de agosto
Nosotros somos piedras vivas
Nosotros somos las piedras vivas del edificio de Dios, unidas profundamente a Cristo, que es la piedra de sustentación, y también de sustentación entre nosotros. ¿Qué quiere decir esto? Quiere decir que el templo somos nosotros, nosotros somos la Iglesia viviente, el templo viviente, y cuando estamos juntos entre nosotros está también el Espíritu Santo, que nos ayuda a crecer como Iglesia. Nosotros no estamos aislados, sino que somos pueblo de Dios: ¡esta es la Iglesia! (…). La Iglesia no es un entramado de cosas y de intereses, sino que es el templo del Espíritu Santo, el templo en el que Dios actúa, el templo del Espíritu Santo, el templo en el que Dios actúa, el Templo en el que cada uno de nosotros, con el don del Bautismo, es piedra viva. Esto nos dice que nadie es inútil en la Iglesia, y si alguien dice a veces a otro: «Vete a casa, eres inútil», esto no es verdad, porque nadie es inútil en la Iglesia, ¡todos somos necesarios para construir este templo!
Audiencia, 26 de junio de 2013